martes, 23 de septiembre de 2014

Super-duper mix

Procedo a escribir ya con una gran taza gran de té. La verdad es que me pone mal no postear, y acá viene el controversial ¿por qué no hacemos las cosas que queremos hacer? y aunque tenga la respuesta perfecta y obvia para esa pregunta, por el momento no puedo cambiar el sistema en el que vivimos, ¿así que deberé acostumbrarme a esto? Bueno, por lo menos por un rato más. Pero sin olvidar que somos seres humanos y no caer en el pozo de la vida metódica y monótona. Creo que siempre planteo éste percance de mi vida. Probablemente porque lo que me rodea y nos rodea exige un poco de todo ésto, y claro está que también las vidas libres -o por lo menos las imágenes de las vidas libres- me vuelven loca. En literatura estamos viendo el surrealismo, se preguntarán o no qué tiene que ver con lo que estoy hablando, pero, tiene que ver. El surrealismo está por encima o por debajo de la realidad, va más allá de los límites planteados por la sociedad, o por lo menos así lo entendí yo. Nos obliga a suspender el significado dado a cada cosa para ver otras. Vivimos adormecidos y acostumbrados por la sociedad, por lo cultural, por el sentido objetivo necesario en cada cosa que se nos ha inculcado a medida que crecimos, involuntariamente.  Esa rutina que aglomera a todos y cada uno, de la cual es casi imposible no formar parte, nos hace perder la capacidad de sorprendernos cada más de las cosas. Es inevitable no perder esa capacidad, porque se nos va arrebatando a medida que vamos aprendiendo como funcionan las cosas. 
No estoy planteando ninguna problemática life-changing, pero son cosas que me pongo a pensar. Porque cuando nos hicieron escribir un texto surrealista usando universos semánticos diferentes, por decirlo así, es claro que no pude, por la búsqueda de algún sentido. Conclusión del día de la fecha? Un niño que está aprendiendo el significado de lo que es una puerta o lo que fuese puede escribir un texto surrealista y que sean felices haciendo cosas que quieran hacer.

Entonces, aparte de mis pensamientos que se encuentran arriba, el post también tiene una orientación diferente. Las cosas que más se me cruzan por la cabeza en estos momentos. Supongo que ahora, mientras suena phoenix de fondo, me relajo un poco más de hacer ejercicios de matemática y les cuento, aparte me hago una lista de cosas.

  • Encabezando la lista, lo más utópico, ir a Berlín y a Barcelona. Amén.
  • Le bajo el mambo a la utopía, y aparece el querer tener más tiempo para pintar, dibujar, aprender más técnicas y todo derivado de crear.
  • Progresar y sentir el progreso.
  • Hacer posts más seguido.
  • No colgar con las cosas, en especial con el colegio
  • Ponerme fechas límite para algunas cosas porque sino me voy de mambo con las cosas.
  • Hacer de una vez por todas los emprendimientos que quiero hacer.
  • Me quiero ganar las entradas para Franz Ferdinand
Y de paso, les dejo una recopilación de bellas imágenes. Los re quiero <3 <3





























































Jucho.

3 comentarios:

  1. Juchoooo :) Que lindo leerte. Creo que no hacemos las cosas que nos gustan porque nos esforzamos más por hacer aquello que
    no nos gusta porque responde a las demandas de los demás, la escuela por ejemplo. Si no lo hicieramos nos vamos a ver
    envueltxs en problemas grandes jaja. Mientras que dejamos para después lo nuestro, porque sabemos que un poquito más
    vamos a sobrevivir.
    En cuanto a los viajes cuando menos te des cuenta los vas a concretar, te cuento algo chiquitiito: yo cuando era más chica
    flashaba "me quiero ir de vacaciones con mis amigxs", y sin darme cuenta lo hice... Siempre pasa así, las condiciones
    se dan, pero si las ganas y el esfuerzo estan, siempre se vuelve una realidad, y además vas disfrutando el proceso.

    ¡Mucha paz!

    ResponderEliminar
  2. Holaaaa!!
    puff lo que es esta epoca, nadie esta por blogger para calmarnos a los demas que andamos en la misma :D me encantaron las fotos, Dios quiero ir a Europa
    Besos

    ResponderEliminar